Los macronutrientes son nutrientes esenciales que nuestro cuerpo necesita en grandes cantidades, como carbohidratos, proteínas y grasas. Son fundamentales para proporcionar energía, construir y reparar tejidos, y regular diversas funciones corporales.

No hay una respuesta única para todos, ya que depende de las necesidades y preferencias individuales. Sin embargo, se recomienda hacer al menos tres comidas principales al día y, si es necesario, incorporar pequeños refrigerios saludables entre comidas para mantener un nivel de energía constante.

No es necesario eliminar por completo ningún alimento, a menos que haya una razón médica específica. Una dieta saludable se basa en la moderación y el equilibrio, incluyendo una variedad de alimentos nutritivos y limitando el consumo de alimentos procesados y altos en azúcares y grasas saturadas.

Al comer fuera de casa, es útil planificar con anticipación, elegir opciones más saludables como ensaladas o platos a la parrilla, controlar las porciones y evitar el exceso de salsas o aderezos. También es importante escuchar las señales de saciedad y comer conscientemente.

La hidratación adecuada es crucial para un buen funcionamiento del cuerpo. El agua desempeña un papel vital en la digestión, absorción de nutrientes, regulación de la temperatura corporal y eliminación de toxinas. Se recomienda beber suficiente agua a lo largo del día y ajustar la ingesta según la actividad física y las condiciones climáticas.